¿Qué es la metodología Design thinking?
El Design Thinking es una metodología que propone crear productos y servicios que satisfagan las necesidades de los usuarios pero, a diferencia de como se ha hecho tradicionalmente, haciéndolos parte activa del proceso de creación.
Design Thinking en la práctica.
Si bien así se cree, el Design Thinking NO es un concepto abstracto, es una metodología clara que tiene establecidos los siguientes pasos para llevar a cabo:
- Empatizar con los usuarios, para extraer la mayor información posible que nos ayudará a entenderlos mejor.
- Definir las necesidades, para tener una base sobre la que se puedan desarrollar alternativas que aporten valor.
- Idear posibles soluciones, teniendo en cuenta la información obtenida en los dos pasos anteriores y buscando siempre la satisfacción del cliente.
- Diseñar un prototipo, que no es la solución final ni la respuesta a la necesidad, si no una de las ideas planteadas para llegar a lo que se busca, la creación de un producto o servicio que genere valor agregado.
- Evaluar el prototipo, porque los tests son necesarios en el proceso de mejora continua y búsqueda de un producto o servicio excelente.
Ahora sí, desglosemos cada uno.
1. Empatizar
Esta metodología se diferencia a las tradicionales, que se centran en investigaciones de mercados y estadísticas, porque en ésta la fuente de información son directamente los usuarios. Lo que se busca es entender lo que ellos experimentan en relación a un tema en concreto directamente relacionado con nuestro producto o servicio.
Por esto, no basta con simplemente indagar, es necesario experimentar lo que viven las personas dentro de su entorno, ponernos en sus zapatos, de modo que podamos entender mejor sus necesidades, problemas y deseos.
2. Definir el problema
Luego de habernos puesto en los zapatos de las personas para quienes queremos crear un producto o servicio, la idea es determinar cuáles son las áreas de oportunidad.
Posteriormente se deberá especificar cuál o cuáles son esos problemas o desafíos que se debe intentar resolver y que nos llevarán a buscar una solución innovadora.
3. Idear las posibles soluciones
En el Design Thinking, la lluvia de ideas desde diferentes perspectivas es fundamental para encontrar soluciones innovadoras a los problemas que se plantearon.
La clave en esta etapa está en fomentar la participación y en reconocer como válidos todos los puntos de vista. Recuerda que, normalmente, las ideas más descabelladas son aquellas capaces de crear soluciones radicales y, a su vez, innovadoras. ¡Así que no tengas miedo de arriesgarte!
4. Prototipar modelos
Luego de escuchar ideas, rayar y escoger soluciones, se procede a hacer el diseño de éstas. La idea es tangibilizarlas de manera física o digital.
En este paso puedes ser muy creativo, no necesitas un sotfware especializado ni un prototipo en 3D, lo que importa es que tengas un prototipo al cual le puedas hacer ajustes graduales, en caso de que se requiera, en el siguiente paso.
5. Evaluar y testear los prototipos
¡Ese paso es el definitivo!
Aquí es donde el usuario interactúa con el prototipo y en el que nosotros podremos obtener el feedback/retroalimentación de su parte para hacer mejoras que nos ayuden a perfeccionarlo.
Hay que tener en cuenta que este proceso es algo repetitivo en el que, dependiendo la evaluación que haga el usuario, deberemos devolvernos uno o varios pasos atrás, hasta dar con el resultado esperado por él y perfeccionar el modelo lo suficiente como para hacerlo una realidad y, ahí sí, ofrecerlo.
Design Thinking, más que una forma de crear e innovar
Además de ser una metodología que puede ayudar a cualquier empresa a asumir diferentes problemas, el Design Thinking tiene varias ventajas interesantes.
Mientras propone crear soluciones que se adapten a las necesidades de las personas a través de un método donde el aprendizaje y el fracaso hacen parte del proceso, el pensamiento de diseño se convierte en una herramienta cuyo valor no se reduce exclusivamente a posibilitar la creatividad y la innovación dentro de cualquier empresa.
Viéndolo de una forma más amplia, el Design Thinking es una forma de aprender mientras se crea y se buscan crear soluciones que se adapten mejor a las necesidades de los usuarios.